La novela de Jorge Armando Otálora no termina, después de que la Procuraduría lo suspendiera por tres meses y verse forzado a renunciar a su cargo como defensor del Pueblo, ahora tendrá que responder a la Fiscalía General de la Nación, que anunció que lo citará a interrogatorio.

El anuncio se debe a la denuncia formal que presentó la exsecretaria privada de Otálora, Astrid Cristancho, sobre comportamientos de acoso sexual y laboral en los que habría incurrido el exdefensor.

Así pues, la denuncia formal continúa su trámite, y en los próximos días la fiscal sexta delegada ante la Corte Suprema escuchará una ampliación de la denuncia hecha por Cristancho inicialmente y, posteriormente, citará a Otálora para que de sus declaraciones.

En las acciones judiciales se manifestó que Otálora ejerció malos tratos en contra de sus subalternos, a quienes insultaba, recargaba de trabajo y humillaba cuando creía que no se estaban cumpliendo las metas. 

"Me encontré desde el principio con una inclemente violencia verbal y sicológica, gritos, zapateos, matoneos, amenazas, pataletas, malos tratos en general. Este comportamiento es denigrante no solo para mi sino para muchos de mis compañeros", indicó en su momento Cristancho.

A estas denuncias se sumó posteriormente las de acoso sexual, entre las que se contaban una serie de fotos eróticas que Otálora le mandaba a su exsecretaria.